El Barrio de las Letras de Madrid es uno de los sitios más bonitos de visitar en Madrid.
Así que es evidente que quedan pocas cosas que se puedan decir a un turista que vaya a pasar una mañana por esta zona del centro madrileño. Está todo dicho. ¿Todo? No, todo no.
Seguro que hay algún plan que dentro de 5 años recordarás y que no vayas a dudar en recomendar a cualquier amigo que vaya a Madrid. Algo que no se haya escrito antes, algo que resulte curioso, algo que no hayas visto en ninguna otra ciudad del mundo…
Querido amigo, en este post te vamos a recomendar un recorrido de 5 siglos de historia, desde 1581 a 1920, viendo las 16 inscripciones que hay en el pavimento del Barrio de las Letras (concretamente en la calle Huertas). Esas inscripciones son pequeños fragmentos de obras maestras de la literatura española que marcan un trayecto que hace siglos ya recorrieron algunos de los mejores escritores de la literatura universal. Si quieres saber cuáles son esas 16 inscripciones, sigue leyendo.
En este recorrido veremos también monumentos de los que ya te habrán hablado (y sobre los que no profundizaremos, porque ya lo han hecho otros muchos antes que nosotros). Pero, además, te vamos a recomendar algunas cositas adicionales que no conoces. ¿Nos acompañas?
Comenzamos en la puerta del Sol de Madrid.
Son las 11 de la mañana y te vas a dirigir al Café Central, que está a 350 metros. Y en ese café, aparte de tomarte un café, vas a preguntar cuándo es la siguiente sesión de jazz (la respuesta será esa misma noche y, si te interesa conocer la programación, escríbeme, que yo te la mando).
De ahí nos dirigimos, caminando por la calle Huertas, a la búsqueda y admiración de las 16 inscripciones: desde el Quijote de Cervantes a las rimas de Bécquer, desde la Fuenteovejuna de Lope de Vega hasta la Canción del Pirata de Espronceda. A lo largo de este paseo irás viendo iglesias, conventos, museos o estatuas que te dejarán maravillado: la Plaza de Santa Ana, el Ateneo, la Casa Museo Lope de Vega o el convento de las Trinitarias Descalzas de San Ildefonso. Busca en Google la historia de estos sitios, porque te va a encantar.
Pero no nos detengamos, veamos las 16 inscripciones. Yo os llevo.
- 1
Misericordia, 1897, Benito Pérez Galdós.
- 2
Ande yo caliente, 1581, Luis de Góngora.
- 3
Rimas, 1871, Gustavo Adolfo Bécquer.
- 4
Don Juan Tenorio, 1844, José Zorrilla.
- 5
Discurso de entrada de José Echegaray en la Real Academia Española, 1894.
- 6
El Quijote, 1605, Miguel de Cervantes.
- 7
Soneto de Francisco de Quevedo, 1648.
- 8
Fuenteovejuna, 1619, Lope de Vega.
- 9
Versos y oraciones del caminante, 1920, León Felipe.
- 10
Fiesta de toros en Madrid, 1777, Nicolás Fernández de Moratín.
- 11
El sí de las niñas, 1805, Leandro Fernández de Moratín.
- 12
Cartas a Andrés, 1832, Mariano José de Larra.
- 13
Canción del pirata, 1835, José de Espronceda.
- 14
Lieders, 1858, Rosalía de Castro.
- 15
Novelas amorosas y ejemplares, 1637, María de Zayas.
- 16
La vida contemporánea, 1916, Emilia Pardo Bazán.
Por cierto, yo haría una parada a las 12:30 para tomar un aperitivo. En la calle Huertas hay 1000 sitios. Consideremos que es un alto en el camino.
Una vez vistas esas 16 inscripciones, nuestro siguiente destino es la librería Miguel Miranda, en la calle Lope de Vega. Una librería preciosa, con una escalera de caracol de película y que está especializada en libros digamos raros.
Por si no hubieras tenido suficiente cultura, nos vamos a otra librería más, situada sólo a 180 metros de la primera: la librería Desnivel, en la plaza de Matute 6. Esta segunda librería está dedicada a libros de viajes y, por lo que vi, de montañismo.
Y para finalizar nuestro paseo, y ya que ha llegado la hora de comer, nos vamos a ir a la puerta del hotel Westin Palace. Enfrente está el carillón goyesco del edificio plus ultra (al lado está la estatua de Cervantes y desde donde estés podrás ver la iglesia de los Jerónimos), del que a las 15:00 (bueno, también a las 12:00, 18:00 y 20:00) salen 5 figuras diseñadas por Antonio Mingote a representar un pequeño espectáculo de unos 3 minutos de duración. Si has estado en Praga, esto es parecido.
Fin de la ruta. Hora de comer. Vete a la taberna de la Daniela de Medinaceli. Pide croquetas de jamón y morcillo estofado. Este sitio no puede ser más auténtico y no es un sitio de turistas, está lleno de madrileños. Por otra parte, su especialidad es el cocido. ¡Qué lo disfruten!
P.D. si te quedan ganas y tiempo, vete a la galería de tiendas del Four Seasons, está a 450 metros del Palace (5 minutos andando). Merece la pena verlo.
